Hoy es jueves, que dentro del alfabeto hebreo corresponde a
la letra GUIMEL (3), en relación con el ojo derecho, también en relación con el
planeta Júpiter, asociado a este día de la semana.
Sintetizo los últimos y más importantes movimientos
planetarios para que podamos aprovechar y organizarnos mejor en el día a día,
de una manera general al menos.
Estos dos últimos
días se han puesto retrógrados Saturno
(el día 18; Binah) y Plutón (el día
23). Aunque a cada uno de nosotros nos afectará de una manera diferente, ya que
ocuparán en su tránsito casas distintas, según la carta astral de cada uno,
podemos tener en cuenta algunos temas que están relacionados con sus energías
arquetípicas, brevemente. Además, ya está cerquita la Luna Llena, el próximo lunes 30 de abril, en el signo de Escorpio.
Cuando se trata de Saturno, estamos trabajando con la
conciencia de los límites, hasta dónde podemos llegar ahora y cómo sobrepasar con
estrategia adecuada los bloqueos que impiden avanzar, si así estamos sintiendo
que es el momento. Las aparentes dificultades y los retrasos, así como el
sentido de lo concreto, de lo práctico, de las plataformas con las que contamos
para construir, es importante tomar conciencia de ello para diferentes áreas de
nuestra vida el ir observando a este respecto qué ocurre dentro y luego fuera.
Admitamos también por unos días cierto cansancio,
descansemos, cuidémonos, a la vez que realizamos todo el trabajo que va
surgiendo, que nos piden, o que sabemos que hemos de hacer, más allá de
responsabilidades cotidianas.
Es un momento para permitir a nuestra imaginación y
creatividad recibir inspiración para reorganizar y planificar con calma.
Plutón, que es el regente de esta Luna Llena en Escorpio,
nos motiva para profundizar en nuestras emociones, introspección y análisis,
cómo seguir aprendiendo a trabajar con esta energía emocional instintiva más
primitiva, encauzándola, liberando traumas y sufrimiento, encaminándonos hacia
la serenidad y la verdad de nuestro “ser”, del camino y misión de nuestra alma.
Sin prisas podemos llegar a niveles de conocimiento y
sabiduría mayores, ayudas de todo tipo, personas, enseñanzas, un libro, una
imagen, un sueño, un encuentro fortuito, una música, todo está delante de la
conciencia para comprender en profundidad nuestra historia y nuestro proyecto
de vida, que siempre está enlazado a otras almas trabajando en equipos de
cooperación mutua para mejorar nuestros entornos, la sociedad, el planeta.
La Luna Llena nos invita a comunicarnos con cariño,
armonizarnos y favorecer la armonía donde estemos y vayamos, queriendo ver qué
nos dice el corazón y cómo se comporta nuestro cuerpo ante respuestas concretas
y cómo digerirlo. Elegir qué hacer con lo que sientes, a voluntad, dominando
tus energías, escuchando tu sensibilidad.
Hay siempre vías de solución y caminos por descubrir de gozo
en la confianza.