En este Plenilunio tanto el Sol como la Luna estarán en
aspecto armónico con Marte y Urano, aunque estos planetas no tienen nada que
ver con la energía lunar. El eje que se activa es el de Virgo-Piscis, que
corresponden a los elementos Tierra y Agua respectivamente. Por una parte
podemos conectar mentalmente con estos planetas que nos invitan a la acción y
al cambio, pero hemos de ver cada uno qué disposición tiene su cuerpo para
programar actividades intensas, o si tiene que ser moderado y, de momento,
programar para cuando recupere el equilibrio con la dieta adecuada y el reposo
necesario. Y, sobre todo, observando cómo influyen los pensamientos en las
emociones y cómo regular el cuerpo emocional si fuera necesario con imágenes y
pensamientos positivos, sin que por ello se haya de ignorar los temores que
puedan surgir.
Se puede aprovechar para hacer cambios internos, cortar con
hábitos que desgastan, sobre todo es momento de meditaciones y lecturas que
favorezcan el sentimiento interior de fuerza y autonomía, podemos participar en
la familia, en la comunidad, pero sin crearse cargas ni dependencias, de otros
hacia nosotros, y procurar recuperar nuestra propia fuerza, paso a paso, ser conscientes de cuándo hay manipulación.
La expresión emocional en Leo, el signo anterior, no debe
llevarnos al vacío, al cansancio, a sentirnos heridos, ya sea en nuestras
relaciones afectivas, amistades, padres-hijos. Hemos de observar cómo nos puede
afectar la falta de apoyo y de reconocimiento, tanto en lo emocional como respecto a nuestros talentos creativos, hemos de encontrar ese aliento interior que se
sostiene en nuestra conexión con ideales que nos nutren, con ideas optimistas,
y qué medios de expresión cultural elegimos para fomentar en nosotros este
sentimiento interior de bienestar, de comodidad en la "propia casa", dentro de uno mismo, en ese santuario particular que hemos de visitar lo más a menudo posible, en nuestro
mundo y raíces profundas como seres únicos. Si el ánimo decae hemos de repolarizar
emocionalmente, que es algo que puede ocurrir, por ejemplo, durante una mudanza, cuando una relación afectiva termina, entonces hemos de poner en marcha nuestra voluntad para vivir con creatividad situaciones límite, imponernos suavemente una disciplina basada en motivaciones que interiormente fomenten un mayor entusiasmo, ser muy conscientes de qué es lo que nos gusta hacer y con qué disfrutamos en el tiempo libre cuando estamos solos, y no perder el contacto con otras personas a quienes poder aportar algo o mucha alegría con pequeños detalles.
No hemos de exigir ni imponer porque esta vía es destructiva,
como decía Dane Rudhyar al mencionar el signo anterior, Leo, ya que se tiende de esa manera a saciar tan sólo los
propios deseos desde el egoísmo y narcisismo. Este eje Virgo-Piscis nos conecta
con la búsqueda del sentido de la existencia, vivir con sentido sabiendo que
siempre somos parte de la comunidad y que cuando compartimos, en libertad y con
conciencia, de diferentes maneras, pero siempre desde la bondad, nos estamos renovando continuamente, la
abundancia se expresa en un flujo continuo, en armonía para todos.
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