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Y hoy la Luna, que en la carta natal nos indica
nuestra necesidad de relacionarnos, desde Acuario (Aire: ideas, pensamientos,
comunicación), también es una energía arquetípica que despierta en nosotros la
inclinación a seguir los altos ideales de una humanidad que evoluciona según
las Leyes Universales que rigen el Cosmos; forma un sextil con el
"frío" Saturno: la forma (también nuestro cuerpo físico) y los límites expandiéndose y dilatándose en el fuego entusiasta de
Sagitario: y una cuadratura con Venus en el transformador signo de Escorpio (Agua: emociones).
Toda una invitación a repasar nuestra manera de
relacionarnos desde nuestra esencia, desde lo más auténtico de nosotros mismos,
desde la libertad interior. Y esto se destila de forma espontánea y natural
normalmente en momentos muy precisos y con personas muy concretas, lo sabemos,
son "momentos mágicos" que nutren y enriquecen profundamente, las defensas se derrumban. Son
momentos en los que podemos expresarnos desde los ideales (Acuario) que nos
motivan a vivir enraizados (Saturno, primer chackra) y motivados en el planeta
Tierra, sabiendo que siempre estamos dispuestos a la transformación (Escorpio),
creciendo, aprendiendo, reposicionándonos respecto a situaciones y vivencias, a nuestras relaciones, tomando nuevas decisiones debido a circunstancias emergentes. Es momento, con plena
conciencia, de recolocar y sanar algunos aspectos que surgen aún del pasado, los recuerdos también los gobierno la Luna, para poder encontrarnos (Luna) con el mundo y en el mundo, con la realidad (Saturno) desde la armonía
(Venus) interior.
Un paso más es posible ahora, precisamente porque estamos
construyendo una Nueva Humanidad cuyas relaciones son de amor y de humor, de
juego, de alegría, de creatividad, de plenitud.
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